¿Cómo que golpe de estado?

Rafael Puente*

Viernes, 29 de noviembre de 2019 ·

Desde México hasta el Chapare se habla de que la caída de Evo fue un “golpe de Estado”, por lo que parece pertinente que analicemos lo ocurrido el pasado lunes. Se comprende que el mero hecho de que Evo haya optado por el “exilio” (aceptando la invitación de López Obrador) haga pensar a muchos que el presidente boliviano ha sido víctima de un golpe… Pero pensemos un poco.

¿Alguien recuerda un solo caso de “golpe de Estado” en que se le haya pedido su renuncia al presidente o presidenta? Quién le hubiera dado a doña Lidia Gueiler semejante amabilidad… Los golpistas no piden nada, se limitan a quitar y poner gobiernos. En cambio a Evo y Linera se les pidió la renuncia…

Más acuciante todavía: ¿Alguien recuerda un “golpe de Estado” en el que no se sabía quién iba a ocupar la Presidencia? En todos los golpes, lo primero que queda claro es quién lo dirige y, por tanto, quién va a ser el nuevo presidente. 

Cuando hay “golpe” no hay sucesión constitucional. En nuestro caso ha habido un esmerado proceso de constitucionalidad: una vez que Evo renunció y que su Vice también había renunciado, se buscó a la Presidenta del Senado para que asuma el cargo, pero también había renunciado, y lo mismo pasó con el Presidenta de Diputados, y, al final (por exclusión) tuvo que asumir la presidencia Jeanine Añez, que era relativamente poco conocida y que no había tenido nada que ver con la salida de Evo.

¿Alguien recuerda un “golpe” que haya derivado en una desesperada convocatoria a las autoridades legislativas para que “acepten la renuncia” del Presidente? En todos los golpes que conocemos el Órgano Legislativo queda fuera de juego (o se limita a un papel pasivo y humilde). En estos días todos los poderes (y sus representantes) se mantuvieron (salvo que renunciaran). Y la nueva Presidenta tiene claro que su mando es provisional y que lo único que tiene que hacer es convocar a nuevas elecciones (como se supone que ocurrirá en nuestro país). ¿Algo que ver con “golpe de Estado”? No se dan golpes para convocar a elecciones…

No, señores, seamos serios. En Bolivia no ha habido ningún golpe de Estado. Lo que ha habido es el agotamiento de un proceso que había empezado muy bien (personalmente sigo afirmando que el primer gobierno de Evo fue de lejos el mejor de nuestra historia). Pero el segundo gobierno ya mostró una grave decadencia, con el fin del Estado participativo, el fin de la defensa de la Madre Tierra, el gasto absurdo de los recursos estatales, el avance preocupante de la corrupción y el fin del nuevo horizonte del Vivir Bien… Y el tercer gobierno no hizo más que llevar todo eso al extremo.

Y cuando en mitad de esta situación decepcionante, el binomio presidencial decide convocar a un referendo para seguir disfrutando del poder y pierde el referendo, y a pesar de eso sigue empeñado en candidatear, los sectores populares empiezan a alarmarse y a movilizarse.

 Y cuando en las elecciones del 20 de octubre, el MAS aparece como ganador, y luego la OEA concluye que esas elecciones habían sido fraudulentas, ahí la bronca popular se acumula, y el país se paraliza durante tres semanas, y es la ciudadanía la que plantea la renuncia del Presidente, y lo logra. Nunca se vio un golpe de Estado con esos componentes.

Finalmente, ¿alguien recuerda algún “golpe de Estado” en el que no participan activamente ni las Fuerzas Armadas ni la Policía Nacional? Nunca se dio un caso ni siquiera parecido. Evo y Linera renunciaron porque así lo exigían las masas movilizadas (a las que las organizaciones evistas no pudieron arrinconar, pese a que lo intentaron). Y el binomio aceptó la invitación de exiliarse en México, a lo que tenía derecho, pero sin que esa invitación sea suficiente para calificar lo ocurrido de “golpe de Estado”.

Lo que sí tenemos es un gobierno de derecha, a lo que ya nos habíamos desacostumbrado, pero además con la perspectiva de que en las próximas elecciones es seguro que ganará la derecha (aunque sólo sea por falta de candidatos aceptables de la izquierda). Ni modo. A ver si aprendemos.

*Miembro del Colectivo Urbano por el Cambio (CUECA) de Cochabamba.